jueves, 9 de mayo de 2019

¿Cómo ser madre y CEO?


Ser madre es una de las etapas más hermosas que vive la mujer, pero a la vez, una de las más retadoras porque no existe un manual de cómo ser la mamá perfecta cuando se tiene, al mismo tiempo, un rol de mujer líder dentro de una corporación multinacional.

La importancia del equilibrio
Ser CEO y madre implica saber priorizar y manejar el tiempo estratégicamente.  Se debe buscar un equilibrio para reducir el estrés que genera tener varias responsabilidades y roles en la vida. 

Ana Maria Orozco CEO regional de Grupo Lala, además de ser líder de una corporación multinacional también es madre, un buen ejemplo de cómo debemos equilibrar estos roles.“En Grupo LALA, somos muchas las mujeres que tenemos la oportunidad de desempeñar puestos de liderazgo. En mi experiencia he logrado identificar uno de los principales retos como líder, y es lograr la sincronía y el equilibrio de todas mis responsabilidades.  Sin embargo, la clave está en invertir y priorizar el tiempo necesario en cada tarea.  Enfocándome en las soluciones y no en los problemas”, comentó Orozco.

Lograr el equilibrio entre ser madre y mujer trabajadora requiere de un compromiso de la familia primaria y de la empresa. La responsabilidad de las corporaciones es ofrecer ambientes flexibles para que las mujeres puedan desempeñar sus roles y responsabilidades, las nuevas tecnologías que ahora permiten trabajar a distancia, están siendo un componente importantísimo para alcanzar este balance.

“El liderazgo femenino enfocado en valores y equilibrado logra un estilo integrador e influenciador. La capacidad de ponerse en los zapatos de otra persona y de comunicación son más fuertes en las líderes mujeres. Estas cualidades se combinan exitosamente para lograr los resultados, creando ámbitos abiertos, flexibles, inclusivos y colaborativos”, concluyó Orozco.

Un liderazgo exitoso, no importando el género, es el que se basa en valores.  Los valores en el ámbito profesional ofrecen ambientes sanos donde hacer lo correcto es el camino sin discusión.  Ser CEO mujer representa varios retos de equilibrio de vida, pero también es una oportunidad para que la esencia del liderazgo femenino impacte la vida de las empresas y las personas que las conforman.                           


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