lunes, 19 de junio de 2017

Emprendedores: de la teoría a la práctica por medio de simulación SHAD

Anualmente, el Programa de Posgrado UFM Acton MBA in Entrepreneurship lleva a cabo SHAD, una de las simulaciones más emocionantes y desafiantes del curso Operations & Costs. Este año, 10 estudiantes fueron partícipes de la simulación, la cual, requirió de hasta 28 horas de ensayos y prácticas previo a la competencia final. En la actualidad, Acton y Harvard Business School son las únicas instituciones educativas que han hecho de esta simulación una parte integral de sus programas de maestría.

La simulación consiste en la formación de una línea de producción de circuitos en la que los alumnos diseñan procesos, asignan tareas según sus talentos, habilidades y capacidades y, administran efectivamente tanto inventarios como cuellos de botella y el flujo de efectivo del proyecto.

Los estudiantes deben fabricar tres diferentes productos/circuitos: economy, deluxe e imperial, -cada uno de ellos con un mayor nivel de complejidad- sin tener certeza de la demanda exacta de unidades que requiere el mercado sino hasta que realmente se va sucediendo. Esta simulación es supervisada por el Profesor Titular del curso, Student Advisor y seis estudiantes que cursaron la materia en años anteriores (y que resultaron ganadores de simulaciones pasadas).

“En SHAD los estudiantes realizan una competencia contra reloj intentando producir hasta 46 circuitos en 20 minutos. Los estrictos controles de calidad a los que son sometidos los circuitos hacen aún más interesante la simulación ya que en caso de rechazar alguna de las unidades producidas, no se aceptan el resto de unidades demandadas sino hasta que se entregue una unidad correcta del modelo específico demandado. Adicional al fin académico de la actividad, SHAD ha demostrado ser siempre un proyecto en el que los alumnos forjan sólidos lazos de amistad.” comentaLicda. Alejandra Alquijay, Directora de Operaciones de UFM Acton MBA in Entrepreneurship.

Lecciones Aprendidas

Tras la realización de SHAD, los participantes enumeraron como lecciones aprendidas de esta experiencia:

·         Es crítico realizar proyecciones optimistas, pesimistas y conservadoras para optimizar la administración de inventarios.
·         Debe mantenerse la atención y concentración en el producto fabricado, ya que la distracción, disminuye la productividad e incrementa la incidencia de errores. 
·         Sin un objetivo claro se pierde el norte de la producción.
·         Conocerse así mismo y a los demás miembros del equipo de trabajo, tanto en términos de fortalezas como debilidades, es clave en la asignación de roles.
·         Especializarse en varias áreas para darse cuenta en lo que cada uno de los emprendedores que conforma el equipo, se desempeña mejor.
·         La práctica constante ayuda a identificar oportunidades de mejora.
·         Es sumamente valioso ser ágil y flexible para poder hacer cambios de esquemas durante la preparación y ejecución.

·         De nada sirve ser el equipo que produce más si la mayor cantidad de unidades producidas son defectuosas.                                                                                                                                    
                                                  

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