Estudios realizados en los últimos meses y presentados en la Reunión Virtual de la Asociación Americana para la Investigación del Cáncer 2020, demostraron las repercusiones del aplazamiento de diagnósticos y chequeos médicos durante la pandemia. En dichos resultados se incluyeron los datos obtenidos de la velocidad con la cual se realizaron procesos de mamografías, pruebas de antígeno prostático y biopsias en 1000 personas de los Estados Unidos, durante los primeros cinco meses de este año en comparación con los mismos meses del 2019.
Investigadores
implementaron un modelo para poderanalizar el comportamiento de diagnósticos
desde la introducción de órdenes de distanciamiento social hasta 1, 3 y 5 años
después del diagnóstico de cáncer. Sus hallazgos abarcan un análisis de muertes
relacionadas al cáncer y el total de años de vida perdidos después de la
pandemia en comparación con los datos previos. El análisis incluyó a 32.583
pacientes con cáncer de mama, 24.975 pacientes con cáncer colorrectal, 29.305
con cáncer de pulmón y 6.744 con cáncer de esófago.
Las diferentes
restricciones que se han implementado en los países para evitar la propagación
del COVID-19, enfermedad altamente infecciosa causada por la cepa SARS-CoV-2,han
interrumpido algunos procesos de atención oncológica coordinada. Según expertos
se ha presentado una disminución en la solicitud de citas médicas y pruebas de
rutina, las cuales desempeñan un papel determinante en el proceso de referir a
los pacientes con especialistas y sus diagnósticos de alta fidelidad, prevención
y tratamiento.
Estos efectos podrían implicar miles de muertes debido a diagnósticos tardíos.Se prevé un aumento del 1% en muertes causadas por cáncer y un alcance del punto máximo de esta enfermedad en el 2021 ó 2022.Además, dicha situación podría generar aproximadamente un millón de muertes por cáncer de mama, próstata y cáncer colorrectal (CCR), números que estaban previstospara el periodo de una década en circunstancias clínicas normales.
"Nuestra mayor
preocupación es el paciente que se encuentra una masa o alteración y retrasa su
evaluación y tratamiento debido a la pandemia. Esta disminución en diagnósticos
de cáncer u otros padecimientos son determinantes para conocer qué tan mortal
resultará una enfermedad en última instancia durante este período de tiempo.” comentó
Otis W. Brawley, MD, reconocido médico oncólogo.
En América Latina la tasa
de detección de cáncer es baja, considerandolas medidas que se han tomado en
los centros médicos, así como el miedo por parte de los pacientes de visitar dichas
instalaciones, esta situación puede empeorar significativamente; por esta razón,
los médicos hacen un llamado para no interrumpir ni retrasar ningún tipo de
tratamiento contra el cáncer que pueda afectar la supervivencia global.
Nuevos hallazgos en la
recopilación de datos
La red de mieloma europea
(EMN) público un consenso donde indica que los pacientes con mieloma múltiple
(MM) parecen tener un mayor riesgo de infección por COVID-19 más grave y
complicaciones asociadas debido a su estado de inmuno depresión, la edad
avanzada y las comorbilidades. Teniendo esto en consideración, recomiendan que el
inicio del tratamiento no debe posponerse en pacientes con daño terminal de
órganos y recaídas agresivas.
Esto aplica también para pacientes
con mieloma múltiple de recién diagnóstico. En particular, estos pacientes
tienen una disfunción inmunológica significativa, pero un clon maligno no
controlado que ha afectado a la inmunidad del huésped mucho antes de que se
haga el diagnóstico de MM en la mayoría de los casos. También se debe tener en
cuenta la carga tumoral general y la historia previa de para proteinemia
asintomática de larga duración. La misma aproximación es recomendada si un
paciente con MM en recaída / refractario (MMRR) logra una respuesta suficiente
[por ejemplo, respuesta parcial muy buena (VGPR) o mejor].
Por otro lado, expertos de la
Sociedad Europea de Oncología Médica (ESMO)con experiencia en tumores malignos,
desarrollaron un paquete de recomendaciones entre las que destacan estrategias para
el manejo y seguimiento de pacientes oncológicos, el uso del factor estimulante
de colonias de granulocitos (G-CSF) y tromboprofilaxis en pacientes con cáncer
durante la pandemia y ensayos clínicos en la era del COVID-19.
“Debemos alejarnos de la suposición de que todos los pacientes con cáncer sin importar su edad, sexo o subtipo de tumor son vulnerables al COVID-19.Según la evidencia actual, solo los pacientes de edad avanzada, con múltiples comorbilidades y que reciben quimioterapia son vulnerables a la infección" aseguró Giuseppe Curigliano, MD, PhD, jefe de la División de Desarrollo Temprano de Medicamentos del Instituto Europeo de Oncología, en Milán, Italia[.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario