De acuerdo con la encuesta de la firma de gestión de inversiones T. Rowe Price sobre Padres, niños y dinero, cerca de la mitad de los adultos jóvenes (47%) que tomaron cursos de educación financiera en la escuela secundaria dijeron sentirse cómodos manejando sus finanzas en su adultez. En aras de fortalecer el proceso de educación financiera en los jóvenes de hoy, Mastercard quiere presentarles una guía para que empiecen a ordenar sus cuentas de manera rápida y sencilla:
1.
Un
buen presupuesto es el punto de partida. Crear un presupuesto realista facilitará
administrar las finanzas personales mes a mes, más si se está viviendo solo por
primera vez y se están acumulando gastos nuevos como el pago de servicios
públicos, compras y limpieza. Por esta razón, se recomienda establecer un
presupuesto mensual para proporcionar guía y control sobre cuánto se gasta y en
qué cosas. Este presupuesto debe ser realista, tangible y contemplar un monto
de ahorro. Podrán acceder por medio de este link a una plantilla para empezar
un presupuesto a prueba de todo.
2.
Priorizar
ahorros. Siempre es buen momento para
empezar a ahorrar y por más joven que se sea, es importante destinar parte de
los ingresos al hábito del ahorro. Por lo general, se recomienda ahorrar como
mínimo 1/3 de los ingresos. Esta meta puede resultar un poco irrealista para
aquellas personas que están empezando su camino financiero, sin embargo,
existen prácticas que se pueden implementar para facilitar el ahorro.
o Realizar las compras con base
en un menú semanal predeterminado; de esta manera se podrán evitar compras
impulsivas.
o
Tener
en listados los gastos en línea y suscripciones de servicios de streaming,
clases en línea o plataformas de películas y series. De esta manera se puede
visualizar el gasto y cancelar aquellos servicios que hayan caído en desuso.
o
Implementar
productos reusables como navajillas de metal, termos y botellas de agua para
reducir el gasto, y más importante aún, contribuir con el planeta.
3. Abrir una cuenta de débito. Es importante abrir una cuenta de débito para concentrar todos los ingresos y llevar cuentas sobre los egresos. Con una cuenta de débito es más fácil mantener un control sobre los gastos, ya que se puede revisar el registro de compras, así como las transferencias efectuadas desde esa cuenta. Este método de pago brinda mayor control y seguridad que otros como el efectivo.
4. Empezar un fondo de ahorros. Los contratiempos o emergencias se pueden presentar en cualquier etapa de nuestras vidas, por esta razón es importante ser precavidos y crear un fondo de ahorro. El monto recomendado es de 1 a 2 salarios base, dependiendo del país. Esta cifra no está pensada para resolver todos los problemas, su objetivo principal es actuar como colchón en caso de requerir una suma de dinero imprevista.
5. Proteger nuestras compras. Una vez que hemos ordenado nuestros gastos y priorizado el ahorro, es fundamental conocer los niveles de protección que están teniendo nuestras compras, tanto en el ámbito físico como el digital. Un consejo que puede ayudar a las personas jóvenes a salvaguardar su dinero es activar las notificaciones de compra de sus cuentas por medio de mensajes de texto o correo electrónico, un servicio que la mayoría de los bancos ofrecen. De esta manera, cada vez que realicen una compra o retiren dinero serán notificados por medio de su entidad bancaria. Y en caso de no reconocer dicha transacción, podrán contactar al banco y reportar el fraude de manera más expedita.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario